Las grasas poliinsaturadas son un tipo de grasas que se encuentran especialmente en alimentos como aceites de semillas (girasol), soja, cacahuete, frutos secos (almendras, nueces), pescados, y en las margarinas vegetales. Se sabe que las grasas poliinsaturadas pueden tener beneficios sobre el corazón, pero a diferencia de las monoinsaturadas no deben superar el 6% de la energía total ingerida. Siempre que se pueda deben sustituir a las grasas saturadas, por ejemplo, tomando más pescado que carne y grasas vegetales en lugar de animales. Hay dos tipos de poliinsaturadas que son esenciales: omega 3 (abundante en el pescado azul) y omega 6 (abundantes en el aceite de girasol y los frutos secos), el organismo no puede producir por sí solo estas dos grasas, así que deben ser incorporados a través de los alimentos.
Tan importante es consumir estos dos tipos de grasas poliinsaturadas como mantener una proporción correcta entre ellas. Se debe potenciar el consumo de Omega 3 frente a los Omega 6 a través de la ingesta de pescado azul y algas.
Son abundantes en: aceite de girasol y margarina
Pueden ayudarte en caso de: sobrepeso, colesterol y triglicéridos.