Planificación de comidas
La clave para evitar el desperdicio alimentario comienza con la planificación de comidas. Antes de ir a comprar, prepara una lista detallada de lo que necesitas y compra solo lo necesario. Además, si planificas tus comidas utilizando ingredientes similares, evitas comprar en exceso.
Fecha de caducidad
Fíjate en las fechas de caducidad de los alimentos y organiza tu despensa y nevera de manera que utilices los productos más antiguos primero. Esto te ayudará a evitar que los alimentos se echen a perder antes de que los consumas.
Almacenamiento adecuado
Es muy importante que los alimentos se almacenen de manera adecuada teniendo en cuenta sus características. Algunos productos, como las frutas y verduras, deben guardarse en lugares frescos y oscuros, mientras que otros, como la carne, deben refrigerarse correctamente para evitar la proliferación de bacterias. Te contamos cómo debes hacerlo:
· Mantén la temperatura del frigorífico por debajo de los 5°C y asegúrate de almacenar los alimentos cocidos en los estantes superiores y los crudos en los inferiores.
· Una vez abierto un envase, guárdalo en un recipiente sellado. Es mejor que evites guardar las conservas en su envase original para que no acabe desperdiciándose.
· Algunas frutas emiten gases que aceleran el deterioro de otros alimentos que se encuentran cerca, por lo que es mejor que separes manzanas, plátanos y tomates de otros productos perecederos. Con esta pequeña acción, conseguirás mantener su frescura y reducir el desperdicio.
Aprovecha las sobras y da rienda suelta a tu creatividad
¡No subestimes el poder del reaprovechamiento creativo! Puedes utilizar las sobras para crear nuevas comidas. Las verduras pueden convertirse en sopas o ensaladas, y las carnes pueden servir para elaborar nuevos platos como unos canelones, croquetas o las berenjenas rellenas. Te dejamos una idea de receta que puedes elaborar con sobras.
¡Prepara una deliciosa Frittata de sobras!
Coge esas verduras y carne que han sobrado de la cena de ayer y mézclalas con huevos batidos. Agrega hierbas frescas, queso rallado y cualquier otro ingrediente que desees incorporar. Vierte la mezcla en una sartén y cocina a fuego lento hasta que la parte inferior esté dorada. Luego, coloca la sartén bajo el grill del horno para que la parte superior se dore y cuaje completamente. ¡El resultado es una frittata personalizada, perfecta para aprovechar al máximo tus sobras de manera deliciosa y creativa!
Control de porciones
¡No comas con los ojos! En este error caemos todos. Sirve porciones más pequeñas para no dejarte comida en el plato. De esta forma comerás solo lo que tengas hambre y repetirás porque realmente lo deseas.